CONSEJO FEDERAL PESQUERO

Langostino: el CFP visitó a las cámaras marplatenses

En el marco de una efervescente polémica entre CaIPA y todos los actores de la pesca chubutense a partir del pedido de la cámara marplatense ante el Consejo Federal Pesquero para limitar la potestad de las jurisdicciones provinciales en el manejo de la pesquería de langostino, los miembros del organismo rector de la política pesquera visitaron Mar del Plata y se reunieron con referentes de distintas cámaras empresarias.

El Consejo, presidido por el Director Nacional de Coordinación Pesquera luego de la renuncia de Tomás Gerpe a la Subsecretaría, escuchó los planteos y reclamos de todos los referentes empresariales de la industria marplatense.

Desde temprano en la sede de la Asociación de Embarcaciones de Pesca Costera las autoridades se reunieron con los dueños de casa, Cafrexport y UdIPA.

Las tres entidades ya habían acordado una serie de requerimientos que solicitaron se tengan en cuenta para garantizar la sustentabilidad de la pesquería de langostino y sobre las que se explayaron durante la reunión que duró casi dos horas.

El tema central fueron los lineamientos de la legislación vigente a la fecha, las Resoluciones 1113/88 y 153/2002 con sus modificatorias. Las normas establecen el límite de 40 metros de eslora total para los barcos que operan en la pesquería y un máximo de 2000 HP, entre varias restricciones más.

En los últimos días corrió con fuerza el rumor de que las empresas integradas de CaIPA/CEPA habían comenzado a presionar para que dicha norma se derogue. Moscuzza se prepara para recibir un nuevo congelador de 48 metros, construido en Armón Vigo. Valastro espera por otro de similares características.

Los empresarios le demandaron al Consejo que se mantenga un mismo criterio para renovación de flota y la evaluación de proyectos pesqueros que contemple la pesquería de langostino y se revisen casos anteriores donde se evidencie un aumento del esfuerzo pesquero.

“Que a los que entraron por excepción se les otorgue un plazo para que se readecuen a la norma. Así todos volvemos a estar en igualdad de condiciones”, reveló una fuente que participó del encuentro. En ese grupo están el “Xeitosiño”, “Bouciña”, “Maria Liliana”, “María Eugenia”, “Mar Esmeralda” y “Altalena”.

 

“Valoramos la visita de todas las autoridades y celebramos que podamos discutir un esquema de sustentabilidad, que también debe pasar por la fiscalización de la calidad del producto que llega a los muelles”, dijo Sebastián Agliano, gerente de la Asociación de costeros.

Las cámaras también solicitaron que no se permita la pesca a barcos sólo con permiso provincial, salvo a aquellos a los que se le conceda una cuota o cupo social que gestionará globalmente cada provincia, y la libre circulación de la materia prima entre provincias.

Desde Cafrexport pidieron mayores incentivos al agregado de valor en tierra. Una alternativa es mejorar los porcentajes de derechos de exportación, que para el recurso langostino no se modificaron cuando actualizaron los de filet de merluza y variado costero descargado por la flota fresquera.

La comitiva abandonó la banquina chica donde todavía sobreviven algunas lanchas artesanales y puso rumbo hacia el barrio Los Troncos donde tienen su sede CaiPA y CEPA. Fernando Rivera nunca estuvo disponible para hacer un balance de la reunión y confirmar lo que dicen otros asistentes al encuentro.

“Solicitaron la derogación de la Resolución 1113/88 para los barcos de las empresas integradas”, confió la fuente consultada. Quien más insiste en la necesidad de voltear la Resolución es José Moscuzza. El empresario marplatense, acostumbrado desde los años noventa a obtener permisos de pesca  ilegales, se apresta a incorporar a su flota a otro barco en similares condiciones, el tangonero “Américo José”, barco cuyo permiso de pesca se originó en una vergonzosa reunión del CFP el último día del gobierno anterior. La reunión que produjo dicho permiso fue tan escandalosa que hasta el entonces subsecretario Miguel Bustamante se negó a participar de ella.

En Armadores los socios esperaron a los consejeros con la misma preocupación que a la mañana en la banquina chica. Diego García Luchetti reiteró la necesidad de “mantener” las normativas vigentes en tanto solicitaron una serie de medidas adicionales como que el INIDEP respalde cada una de las decisiones de manejo referidas a apertura y cierre de aguas nacionales y provinciales.

Además los armadores fresqueros remarcaron la necesidad de conocer la abundancia y distribución espacio temporal de huevos y larvas de langostino en su área de distribución; de prerreclutas y juveniles; hembras desovantes y la composición de tallas, previo al inicio de la pesca comercial en cualquier área.

“La producción de langostino en tierra es muy amplia y generosa en cuanto a formatos y productos. Es absolutamente falso que los productos manufacturados en tierra sean de baja calidad”, aseguró el Presidente de la Cámara de Armadores, ante la consulta de este medio.

“Por el contrario, están siendo muy valorados por los mercados internacionales, Hay colas de primera calidad, en bloques de hasta 10 kilos que valen por encima de los 7 dólares, valor similar a lo procesado en altamar”, dijo el dirigente, en tanto pidió que se fomente que en “las plantas en tierra realicen productos con mayor valor agregado y que generen la mayor cantidad de empleo posible”.

Obtenido de revistapuerto.com.ar

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