El stock sur de caballa continúa estable y por debajo de su potencial pesquero
Desde el punto de vista biológico, el efectivo sur de caballa se mantiene dentro de parámetros saludables. La conclusión se desprende del Informe Técnico del Inidep 35/19, que evaluó su presente y sugirió la captura biológicamente aceptable para este año.
El trabajo, preparado por Claudio Buratti, Paula Orlando y Alejandro Garciarena, integrantes del Programa Pelágicos, sostiene que la situación del efectivo que se localiza al sur del paralelo 39° S continúa “estable y por debajo de su potencial pesquero”.
Según estiman, en el periodo 1990–2018, la biomasa de todos los grupos de edad habría variado entre 99 mil y 202 mil toneladas, con un promedio de 150 mil; y la de reproductores, entre 77 mil y 171 mil toneladas, con una media de 123 mil.
Fuentes de incertidumbre
De cualquier manera, persisten fuentes de incertidumbre debido a la ausencia de campañas de investigación. “No se han realizado desde 2013 cruceros de investigación que permitan reducir la incertidumbre asociada con la estimación directa de abundancia”, sostienen.
La tendencia recién pudo quebrarse en septiembre de este año, cuando el buque “Dr. Eduardo Holmberg” realizó una campaña de ocho días para estimar la biomasa y la distribución del recurso en la zona de “El Rincón”, en el sur de la provincia de Buenos Aires.
Mientras se procesa esa información, los científicos presentan los resultados provenientes de un modelo de producción con estructura de edades. La tarea se complementa con el análisis del riesgo biológico que implicarían distintos niveles de esfuerzo pesquero.
En ese sentido y en línea con lo sugerido en el informe, finalmente el Consejo Federal Pesquero terminó estableciendo una Captura Máxima Permisible 2019 de 27 mil toneladas para el efectivo, con una reserva de administración de 4 mil toneladas.
La flota aún está lejos de ese tope. De acuerdo a los desembarques declarados hasta el 30 de octubre, se llevaban descargadas 5.071 toneladas de caballa en forma global, incluyendo el volumen capturado por encima del paralelo 39° S.
Aunque la cifra denota un mejor rendimiento en relación a 2018. “Los desembarques de caballa del stock sureño han disminuido notoriamente en los últimos años, descargándose sólo 888 toneladas en 2018”, recuerdan los autores.
En general, durante los últimos años la explotación de caballa en los meses de invierno quedó relegada por el peso económico de langostino y merluza. También es cierto que los pocos armadores que fueron tras la especie no encontraron el volumen esperado.
A manera de proyección, los investigadores creen que en las próximas temporadas las capturas se estabilizarían en valores próximos a las 20 mil toneladas anuales, con la biomasa desovante transitando la zona de las 72 mil toneladas.