Puja por la merluza negra y justificaciones en el CFP
Desde la Dirección de Pesca prepararon un informe sobre el estado de explotación de la merluza negra, las inversiones, empleo y sanciones de cada empresa. A partir de esa información propusieron una distribución de la Reserva de Administración distinta a la que realizara el Representante de la provincia de Tierra del Fuego. También se diferencia de la realizada por las empresas Argenova, Estremar y Pesantar, que buscaban un reparto en partes iguales entre las cuatro firmas que participan de la pesquería. Por otra parte, entre los temas más destacados del Acta 24 del Consejo Federal Pesquero se encuentra la solicitud de justificación por falta de explotación de la cuota de merluza que realizó la empresa Ostramar y la justificación de inactividad que el Consejo aprobó al barco San Matías, inactivo desde 2011.
Pesca presenta otra distribución de merluza negra
La semana pasada el Representante de Tierra del Fuego presentó una nota y argumentó ante sus pares que era necesario distribuir la Reserva de Administración sujetándose a los criterios de cuotificación, proponiendo que se asignaran los porcentajes de 4,73% para Estremar; 26,01% a Pesantar y a San Arawa 41,67%.
Desde la Dirección de Pesca realizaron observaciones a la propuesta de Tierra del Fuego indicando que los porcentajes son equivocados y presentaron otro escenario de distribución, tras aclarar que la Reserva de Administración es un porcentaje de la CMP (15% para la merluza negra), que el CFP “resolvió no asignar bajo los parámetros generales” y que su eventual asignación se realiza bajo sus facultades discrecionales. Esto significa que puede distribuirse en base a los criterios de cuotificación o no.
Por otra parte señalaron que el período de capturas que toma la Ley para cuotificar es de 1989 a 1996 y no el período 2010-2015, como figura en la propuesta de Tierra del Fuego; además indicaron que los porcentajes de ponderación para la cuota de merluza negra se establecieron de la siguiente manera: 50% para la historia de captura; 30% para la mano de obra; 15% por producción y 5% por inversiones; por último se decidió descontar 2% ante la existencia de sanciones.
Desde la Dirección informaron que si se aplicasen los criterios de cuotificación como surgen de la Ley de Pesca y la Resolución 21/09, a la empresa Estremar le corresponde el 38,24%; a Pesantar el 23,4%; a San Arawa el 2,99% y a Argenova el 32,63%.
Si se aplica la actualización del período 2010-2015 como propuso Tierra del Fuego, los valores de asignación, según informó la Dirección de Pesca, son los siguientes: 24,41% para Estremar; 28,92% para Pesantar; 9,22% San Arawa y 29,45% para Argenova.
En ambos casos se encuentran groseras diferencias con la propuesta realizada por el consejero Luis Vázquez, en la que la mayor porcentaje quedaba en poder de la firma San Arawa; Estremar quedaba con un porcentaje mínimo y Argenova ni siquiera era contemplada dentro de los actores con participación en la captura.
Ante esta situación irreconciliable entre una propuesta y otra, la asignación de la reserva quedó en suspenso y el consejero de Santa Cruz, Carlos Liberman, pidió que el tema se resuelva una vez que se cuente con toda la información sobre los sumarios.
Caputo sigue pidiendo justificaciones
Ostramar no pudo acreditar las reparaciones que dijo haber realizado en el buque Santa Ángela, que en 2016 realizó solo dos mareas. Lo que está en discusión es la justificación de falta de explotación sobre su cuota de merluza.
Ahora que las presentaciones de Luis Caputo, dueño de Ostramar, son observadas con mayor seriedad, le resulta difícil conseguir las justificaciones; la documentación que presenta siempre es escasa y de dudosa procedencia. De todas formas se le ha dado la oportunidad de mejorar su presentación para ser tratada en una próxima reunión.
En cambio sí se justificó parcialmente la falta de explotación de la cuota de merluza del barco Sumatra, que estuvo inactivo durante cuatro meses producto de reparaciones. El Consejo tras evaluar la documentación presentada decidió justificar el 30% de la cuota correspondiente a 2016.
Justifican la inactividad de seis años del buque San Matías
La última marea del buque San Matías es de noviembre de 2011. Desde entonces se encuentra amarrado y supuestamente desde 2014 se encuentra a la espera de la autorización de ingreso de un motor para su reparación total, algo que aún no habría ocurrido; y según aseguran desde la empresa recién en abril de 2018 el barco estará en condiciones de navegar.
Este buque perteneció a la quebrada Mellino y desde 2016 es propiedad de Propesa, que parece dispuesta a reflotarlo. El tema aquí, como ocurre en estos casos, es si un barco parado durante seis años estará en condiciones de navegar sin poner en peligro a la tripulación. Luego de lo ocurrido con el Repunte cabe preguntarse si está la autoridad de aplicación, Subsecretaría de Pesca y Dirección de Control y Fiscalización, en condiciones de acreditarlo.
Ahora el CFP le ha concedido una nueva justificación de inactividad y la empresa promete que cuando se cumplan siete años de inactividad volverá a navegar.
Obtenido de revistapuerto.com.ar